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Todos sabemos lo importante que es la creación de contenidos para las marcas. Son el pilar fundamental para captar la atención de los distintos usuarios que utilizan las redes sociales. Por esa razón, es muy útil que como marca vayamos implementando una estrategia de contenidos pero que vayan alineados con el embudo de ventas que hemos trazado para nuestra empresa.
Como ya sabemos, un embudo de ventas es una estrategia que tiene como objetivo guiar a los usuarios a través del proceso de compra. Para que puedan convertirse en nuestros clientes. Por lo tanto, para que un embudo de ventas sea efectivo, es necesario tener diferentes tipos de contenido que ayuden a educar, convencer y realizar ventas.
Una manera de complementar tu embudo de ventas, es creando distintos tipos de contenido que permitan atraer, educar, entretener, pero sobre todo, convertir a los consumidores en nuestros clientes. Con ayuda de contenido para redes sociales, puedes hacer que tu contenido sea compartido de manera viral y llegar a un gran número de personas en todo el mundo.
A continuación te mostramos cuáles son los tipos de contenido que existen, para luego ayudarte a escoger qué contenido se adapta mejor a tu marca.
- Contenido de conciencia:
Es el primer contacto que los usuarios van a tener con tu marca, por lo que debe ser atractivo e informativo. En esta primera fase, podrías utilizar contenido educativo como blogs, infografías, videos, etc. Todo con la finalidad de que, que generen interés en tu público objetivo.
¿Qué es el contenido educativo?
Corresponde a ese tipo de contenido que tiene como finalidad enseñar acerca de un determinado tema o área de conocimiento. Son todos aquellos recursos que ayuden a tu público a entender mejor su problema, por qué sucede y pueda ver que con tu producto o servicio podría resolverlo. El contenido educativo en redes sociales puede ser presentado de diversas formas, como:
- Artículos: Si tienes un blog de tu marca, puedes compartir las entradas en tus redes sociales. De esa manera, darás a conocer temas interesantes sobre tu rubro y que vayan de acuerdo con las nuevas tendencias.
- Publicaciones de texto: Aquellos mensajes escritos que explican conceptos, o pasos para llevar a cabo alguna tarea que puede ser de ayuda para tu público.
- Imágenes y gráficos: Aquí pueden estar incluidas las infografías o diagramas que explican procesos de manera visual, los cuales resultan más atractivos y entendibles para tu público.
- Videos: Son aquellos tutoriales, donde se brindan charlas y consejos para que ellos puedan desarrollar por sí mismos aquello que sabes que se le dificulta y eres experto. Los videos permiten sintetizar la información para que ellos puedan compartirla de manera más sencilla. Los pueden presentar en plataformas como YouTube, Facebook, Instagram y LinkedIn.
- Webinars y cursos en línea: Si tú eres experto en algo y puedes impartir conocimiento sobre ello, no dudes en realizar un curso donde más personas puedan tener acceso a tus saberes. Pueden ser gratuitos y algunos de pago, para que también puedas generar remuneración por aquel tema que dominas. Entre algunas de las plataformas que existen tenemos a Udemy, Coursera y EdX.
- Podcasts: Muchas personas prefieren escuchar un libro que leerlo. Si tienes contenido educativo y conoces que tu audiencia es de tiempos muy ocupados, entonces puedes grabar y compartir programas de audio sobre temas educativos específicos.
- Contenido de consideración:
Esta etapa es cuando los usuarios ya están considerando comprar tu producto o servicio, por lo que es necesario crear contenido que les ayude a comprender cómo tu solución puede resolver su problema o necesidad. Puedes utilizar contenido como demostraciones, estudios de caso, testimonios.
¿Qué es el contenido de los estudios de caso?
Este tipo de contenido se refiere a publicaciones que presentan ejemplos reales de cómo tu marca pudo resolver un problema. Estos estudios de caso pueden ser muy útiles para mostrar a la audiencia cómo se pueden aplicar ciertas estrategias en la vida real y cómo se pueden obtener resultados concretos para los problemas que tienen. Son muy efectivos para captar la atención de la audiencia y construir credibilidad, ya que ellos podrán confiar en que tu marca podrá solucionar sus problemas, así como los solucionó antes con otras personas.
El contenido sobre estudios de caso en redes sociales puede incluir información detallada sobre:
- El desafío al que se enfrentaban como marca antes de aplicar la solución.
- La solución que se utilizó para abordar el problema.
- Los resultados obtenidos a partir de la solución implementada.
- El testimonio del cliente que ha sido ayudado en su problema.
- Los aprendizajes obtenidos durante el proceso
- Las recomendaciones para que otros que también puedan enfrentar situaciones similares.
Este tipo de contenido puede presentarse de diversas maneras, como publicaciones de texto, imágenes y gráficos, videos y transmisiones en vivo. Así también como historias reales de clientes satisfechos que han utilizado tu producto o servicio y han logrado resultados positivos. otros ejemplos de lo que podrías mostrar son:
- Testimonios: Experiencias de clientes satisfechos que han utilizado tu producto o servicio.
- Comparativas: Entre tu producto y el de la competencia, destacando las ventajas y beneficios que ofrece tu solución.
- Contenido de marca: Es todo aquello que refuerce la imagen de marca y los valores de tu empresa: tenemos como ejemplo a los videos corporativos, historias detrás de la marca, entrevistas con el equipo, presentaciones de los colaboradores, alguna noticia importante en tu empresa. Todo con la finalidad de que más personas puedan sentir más conexión hacia lo que estás haciendo y que se puedan inspirar de cómo vas progresando
- Contenido de decisión:
Esta es la etapa donde los usuarios ya están listos para tomar una decisión de compra. Es importante que el contenido les ayude a comprender las características y beneficios de tu producto o servicio. Se pueden presentar listas de características, comparativas, garantías, entre otros.
- Historias: Son aquellas publicaciones temporales que se comparten en plataformas como Instagram, Facebook y Snapchat. Los usuarios cuando entran a las redes sociales, lo primero que suelen hacer es entrar a las stories, porque resulta un contenido corto y muy variado.
- Anuncios: para poder promocionar nuestros productos y servicios ante una audiencia específica en plataformas como Facebook, Instagram y Twitter.
- Concursos y sorteos: Su propósito es involucrar a la audiencia y generar interacción en redes sociales. Ya que al sentirse motivados por un premio, tienes más posibilidades de participar y sentir conexión con la marca.
- Transmisiones en vivo: Estos eventos en tiempo real que se transmiten a través de Facebook Live, Instagram Live, Tik Tok live, etc. Ayuda a que las personas que no puedan estar físicamente en el evento, puedan estarlo a través de los medios digitales.
- Contenido generado por el usuario: Son aquellas publicaciones creadas por los seguidores de una marca o de una página, como fotos y videos etiquetados con un hashtag específico. Este tipo de contenido ayuda a que más personas puedan aumentar su confianza en tu marca, porque si el mismo usuario afirma que es positivo tu producto o servicio, significa que auténticamente lo es.
- Contenido de postventa:
Cuando nuestros usuarios ya se hayan convertido en clientes, es importante continuar proporcionando valor a través de contenido útil que ayude a los clientes a sacar el máximo provecho de tu producto o servicio. Podemos empezar ofertando y dando a conocer descuentos especiales por haber sido nuestro clientes. Es importante que en el tipo de contenido que compartamos también estén incluidos los canales de comunicación para poder atender las dudas que puedan tener y darles así un seguimiento personalizado, para incrementar la sensación de preocupación real por el cliente.
Busca que en tus contenidos se recalque constantemente el hecho de que ofreces garantías en caso de daños del producto o servicio. Asimismo contenidos de soporte, que sirvan para poder explicar algunos detalles de la compra y asesorías, también son bienvenidos en esta etapa.
Entre este tipo de contenidos podemos encontrar las actualizaciones y también el contenido interactivo.
¿En qué consiste el contenido interactivo?
El contenido interactivo en redes sociales es aquel que invita a la audiencia a participar activamente en él, para que no se queden solamente como espectadores. Sino que también asuman un papel más comprometido, donde se fomente la conversación y el intercambio de opiniones. Asimismo, nos permite recopilar información útil sobre nuestra audiencia. Acerca de cómo se sienten con nuestros contenidos, cómo responden ante ellos. Esto nos ayuda a conocer mejor cómo podemos optimizar nuestros servicios.
Algunos ejemplos de contenido interactivo en redes sociales incluyen encuestas, cuestionarios, juegos, concursos, videos en vivo con preguntas y respuestas, y desafíos virales. Estos tipos de contenido permiten a los seguidores de una marca o al usuario interactuar directamente con ellos, ya menudo generan una respuesta emocional más fuerte.
Es importante tener en cuenta que cada pieza de contenido debe estar diseñada para una etapa específica del embudo de ventas y debe ser relevante para nuestro público objetivo. De esta manera, podrás educar, persuadir y cerrar ventas de manera efectiva.
Sin embargo puede que aún tengamos algunas dudas de cómo debemos empezar a publicar contenido, cuál se adapta mejor a lo que nosotros ofrecemos como empresa. No te preocupes, te tenemos buenas noticias. Hay una manera de conocer mejor a tu audiencia para que puedas empezar a crear contenido que vaya de acuerdo a ellos, sin dejar de lado los valores esenciales de tu marca.
¿Cómo saber qué tipo de contenido se alinea mejor con mi marca?
Para saber qué tipo de contenido se adapta mejor a tu marca, es importante tener en cuenta varios aspectos:
- Tu público objetivo: Si conoces quiénes serían tus clientes ideales, lo que les preocupa, lo que necesitan y lo que carecen, puedes crear una estrategia de contenidos que les resulte necesaria y relevante. Para ello, podrías hacer uso de herramientas como el mapa de empatía del consumidor, el buyer persona y el customer map.. Estas herramientas te permiten conocer más a profundidad a tu público objetivo Con el mapa de empatía podrás conocer qué ve el consumidor que influye tanto en él, qué escucha a su alrededor, en qué está pensando, qué está sintiendo. Con ayuda del buyer persona vas a poder retratar cómo quisieras que sea tu cliente ideal, qué características tendría, cuáles serían sus tendencias de conducta. En cuanto al customer map, te serviría para conocer el recorrido del cliente. Sabrías qué hace en su rutina y en qué momento es donde precisa la ayuda de tus productos o servicios.
- La competencia: Observa qué tipo de contenido están creando tus competidores y cómo lo están haciendo. De esa forma, sabrás qué es lo que les está funcionando, que no. Así podrás encontrar oportunidades para destacarte entre ellos.
- Tus objetivos: Define qué es lo que quieres lograr con tu contenido. ¿Educar? ¿Generar conciencia? ¿Aumentar tus ventas? De esa forma, sabrás qué camino tomar.
- Experimentar: No siempre vamos a acertar a la primera, se trata de un constante aprendizaje e interacción con tu público, lo que te va a ayudar a cada vez tener mejores contenidos. Prueba usar distintos tipos, analiza la reacción de tu audiencia con cada uno de ellos. Elige los formatos que más prefieren tus usuarios, qué temas ves que le interesan más y adapta tu estrategia para que funcione mejor.
- Los resultados: Utiliza herramientas de análisis para medir el impacto de tu contenido, qué tan bueno ha sido y cómo se lo ha tomado tu audiencia. En base a esa retroalimentación, sabrás cómo debes ajustar tu estrategia de contenidos para que tenga mejores resultados.
Con estas pequeñas recomendaciones, sabrás cómo crear un contenido relevante y eficaz que permita que tu público se convierta en posibles clientes.
Como hemos podido apreciar, los contenidos digitales según la etapa del embudo de ventas en la que nos encontremos, son de suma importancia. Es necesario recordar que debemos mantener nuestro contenido relevante, atractivo y que siempre esté alineado con las necesidades de nuestro público objetivo. También es fundamental que cada pieza de contenido esté diseñada para una etapa específica del embudo de ventas, para así maximizar su efectividad en la conversión de los usuarios en clientes. El embudo de ventas ha de ser tu gran aliado, pero es tu mente creativa la que te impulsará a llegar al corazón de tus clientes gracias a los contenidos digitales.